Para llegar a miles se debe llegar a uno

Cuando Jesús ejerció su ministerio de apenas tres años. tenía en su infinita sabiduría un plan claro, sencillo y efectivo que le permitiera alcanzar a miles no solamente en su territorio o en su tiempo, sino que trascendiera hasta el final de los tiempos.

Jesús llamó uno por uno a sus discípulos, los formó y los envió. Cada uno de ellos era muy distinto, y cada uno de ellos tenía características y personalidades que eran recursos muy valiosos para logra el objetivo.

A veces buscamos un perfil de cristiano, que maneje un “lenguaje espiritual”, que vista de una forma específica o que parezca vivir fuera de este tiempo. Cada uno de nosotros fuimos llamados a hacer algo en el aquí y en el ahora.

Hay casos en la Biblia donde se alcanzaron miles de una sola vez, otros fueron de uno en uno. Sin embargo la estrategia de Jesús, fue formar discípulos, ir de uno en uno.

Con Pedro tuvo unos tratos especiales, como también tuvo su trato especial con Tomás o con los hijos del trueno.

En nuestra iglesia creemos que cada persona importa, por ello tenemos un programa de acercamiento persona a persona, donde cada uno es tratado de forma individual y con la guía del Espíritu Santo buscamos guiar a cada persona a desarrollar sus dones y talentos para Dios.

Aquí nadie será juzgado ni rechazado. El proceso que cada persona inicia en nuestra congregación es de crecimiento y desarrollo. No te vamos a pedir que hagas cambios para encajar en tu modo de ser o vestir . Eso es trabajo del Espíritu Santo y el nuestro es guiarte.

Este programa lo llamamos PAP (persona a persona). Te invitarnos a contactarnos y a sacar lo mejor de ti para Cristo.